Los diez artículos que sería aconsejable llevar a la montaña

Los complementos son necesarios en montaña. Muy a menudo nos preguntas, ¿qué debemos llevar y qué no? Ya que el miedo a sobrecargar la mochila es poderoso. A continuación, 10 ejemplos de material que no debe faltar en tu mochila cuando vas al monte.

Gafas
Los modelos tipo sheriff son muy bonitos para la ciudad, pero si vamos de excursión por la montaña es importante llevar unas gafas que hayan sido diseñadas para ello, con una buena ventilación, que se ajusten bien al rostro, que sean ligeras y, sobre todo, con unas lentes adecuadas (en color y curvatura).

Gorra
Todos tenemos una gorra en casa, de publicidad o de algún equipo de fútbol americano. Son bonitas, pero si vamos a la montaña, mejor dejarlas en casa. Necesitamos una gorra muy transpirable, ligera y con una buena visera. Si hay mucho sol, mejor optar por alguna con protecciones en los laterales y en la parte trasera.

Brújula
El GPS está muy bien. Y si lo tenemos, nos lo llevamos. Pero también es importante llevar con nosotros una brújula clásica. Nunca se sabe lo que puede pasar con la tecnología y siempre es recomendable llevar algo que nos ayude a no perder el norte.

Frontal
Quienes piensen trasnochar en plena naturaleza que no olviden que allí arriba, de noche, no hay farolas y que, para caminar, cocinar, hablar con los amigos, etc. es mejor tener luz. Las viejas linternas han evolucionado y hoy en día hay una amplia oferta de frontales que se ajustan perfectamente a cualquiera de nuestras necesidades.

Multiherramientas
Una navaja vale, pero ¿para qué podemos necesitar un sacacorchos, un abrelatas o unas pinzas en medio de la montaña? Nunca se sabe. Por lo poco que pesan y por su larga lista de funcionalidades, nunca está de más llevar encima una multiherramientas.

Crema
No sólo en la playa es peligroso el sol. También o, mejor dicho, sobre todo en la montaña. No nos confiemos ante una brisa o una temperatura agradable: a más altura, más traicionero es el sol. Un bote de crema ni pesa ni ocupa.

Botiquín
Hay vida más allá de las tiritas y el yodo. Y, si en algo no debemos ser rácanos, a la hora de cargar la mochila es en todo aquello que tenga que ver con la salud. Sin pasarnos, pero analizando muy bien lo que podemos echar de menos.

Botellín
Estar bien hidratado es importante para nuestro rendimiento y nuestra salud. Las viejas cantimploras que pesaban más que el agua que llevaban dentro han dado paso a botellines ultraligeros fácil de cargar y que mantienen el sabor original del agua. También podemos optar por las mochilas de hidratación.

Hornillo
Lo de comer bocadillos día y noche si vamos a dormir algunos días fuera hace tiempo que se superó. La evolución de los hornillos ha sido lo suficientemente importante como para que, pese a estar en la montaña, podamos disfrutar de un buen banquete. Y caliente.

Cubiertos
Aunque estemos en plena naturaleza lo de comer con las manos es un poco incómodo, así que no está de más poner en la mochila algún juego de cubiertos. Los hay que apenas pesan y que, plegados, nos caben en el bolsillo.