> RAQUETAS DE NIEVE
¿Sabías que las raquetas de nieve son una actividad que está ganando muchos adeptos?
Ir en raquetas de nieve se trata de una actividad relativamente sencilla y por ello muy accesible para gente con diferentes niveles de aprendizaje. Esto la hace muy atractiva para familias con niños y grupos de amigos. Pero es importante tener claros algunos conceptos:
· Cada raqueta, en función de su tamaño y materiales, está diseñada para aguantar un peso determinado. Asegúrate de escoger el peso correcto cuando adquieras unas.
· La raqueta cuenta con un sencillo mecanismo: una fijación móvil que nos dará movilidad en el talón en los ascensos. Para las bajadas es más seguro fijar por completo la bota a la raqueta.
· Los cierres son una zona susceptible de golpes y tirones por lo que deberán ser robustos. Existen diferentes modelos con cierres de correas o automáticos (como los crampones) o también cierre de snowboard.
· Deben tener un pequeño crampón en la puntera que incremente el agarre cuando aumenta la inclinación. Algunos modelos cuentan con láminas de metal en los laterales para una mayor sujeción.
· Las alzas en el talón son otra cuestión básica. Nos permiten adoptar una posición más cómoda en las subidas y por lo tanto nos cansaremos menos.
· Como en el resto del equipo, el peso es otro factor importante especialmente si vamos a realizar grandes travesías o si las tendremos que cargar en la mochila.
· Actualmente existen modelos de raquetas extensibles y regulables que se abren en función del terreno y del peso de las personas que las lleven. Otro extra poco usual, pero nada despreciable, son los sistemas de absorción de impactos.
· Las polainas, para evitar que entre la nieve por la bota, y los bastones, con las rosetas puestas, son los compañeros inseparables. Sin ellos se te hará difícil avanzar.
Ya solo te falta ponértelas y echar a andar. Seguro que al principio te sientes un poco patoso, pero no te preocupes, separa un poquito más los pies y déjate llevar por las montañas.