¿Cómo afrontar el riesgo de aludes en la montaña?

1. Prepara la salida. Todos debéis saber qué aludes, de qué tamaño y en qué localización se anuncian en el Boletín de Peligro de Aludes (AEMET). Identifica en el mapa (o en tu cabeza) cuáles pueden ser los lugares críticos donde habrá que decidir.

2. Lleva el material de seguridad. Haz control de DVA/ARVA siempre. Todo el mundo en el grupo debe tener claro que si falla el control de DVA/ARVA no podrá salir. Lleva una pala y una sonda grandes y robustas. Valora adquirir un Avalung y / o un airbag.

3. Usa material seguro. No lleves dragoneras en los bastones. No lleves correas en los esquís.

4. Traza tu itinerario por el lugar más seguro. No hay ninguna razón para no elegir el itinerario de subida más seguro. Abre tu propia traza si es necesario.

5. No expongas nunca todo el grupo. Esquía cualquier pendiente de más de 30 º de uno en uno, manteniendo contacto visual.

6. Reúne el grupo en lugar seguro.

7. Piensa siempre en las consecuencias. Hay que ser un experto para valorar la estabilidad, pero no las consecuencias. Valora siempre que pasaría si hubiera una avalancha.

8. Re-evalúa constantemente tus decisiones. Piensa siempre que está cambiando en la nieve, en el terreno, en el grupo.

9. Mantén una buena comunicación dentro del grupo. Hay que crear un ambiente en el grupo que haga que "lo guay" sea hablar abiertamente de lo que nos preocupa, desde el más novel al más experto.

10. Sé conservador. Tus decisiones deben ser correctas el 99.99% de las veces. Para ello, hay que dar un amplio margen a la incertidumbre.

Las montañas no se moverán de lugar, la nieve estará incluso mejor que hoy. Y además, esquiar es sólo una pequeña parte de las cosas que valen la pena.